Anoche se vivió una intensa gala de expulsión en Gran Hermano. La “pelea”, desde el principio, estuvo entre Gisele y Solange, aunque siempre con un pequeño margen a favor de la tucumana. Con el 43,21% de los votos, “Chizo” debió abandonar la casa por segunda vez.
La salida de la morocha, aliada de Cristian U., desconcertó una vez más al hombre de Barracas, que había solicitado a sus fans, votar por la expulsión de Solange.
Horas después de finalizada la gala, el polémico jugador le confesaba a Pepa, sentirse confundido. “No entiendo la decisión del público”, expresó. “Yo juego todo el tiempo, armo estrategias y estos pibes (por Solange y Emiliano) siguen aquí”. En su diálogo con el chico de la Pampa, agregó: “Estoy re caliente, no sé si no me voy hoy a la madrugada”. “Ya no me importa nada”, sentenció.
Lo cierto es que el hombre de las musculosas rayadas se siente debilitado por la popularidad que adquirió la tucumana. Días atrás, durante un confesionario dijo que “la única que me puede hacer sombra es Solange”.
La salida de la morocha, aliada de Cristian U., desconcertó una vez más al hombre de Barracas, que había solicitado a sus fans, votar por la expulsión de Solange.
Horas después de finalizada la gala, el polémico jugador le confesaba a Pepa, sentirse confundido. “No entiendo la decisión del público”, expresó. “Yo juego todo el tiempo, armo estrategias y estos pibes (por Solange y Emiliano) siguen aquí”. En su diálogo con el chico de la Pampa, agregó: “Estoy re caliente, no sé si no me voy hoy a la madrugada”. “Ya no me importa nada”, sentenció.
Lo cierto es que el hombre de las musculosas rayadas se siente debilitado por la popularidad que adquirió la tucumana. Días atrás, durante un confesionario dijo que “la única que me puede hacer sombra es Solange”.
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